¿Por qué nace

D. Corazón ?

Cualquier proyecto empresarial tiene una causa en concreto, es decir, una razón de ser. Mi vocación comenzó haciendo cosas sencillas, pulseras, collares y pendientes, al principio eran de bolas de distintos tamaños con hilo de pescar o elástico. Con el tiempo fue aumentando mi necesidad de realizar cosas nuevas y renovarme, esa necesidad surgió sobretodo  al ver a las personas con las cosas que yo hacía. A veces no podía evitar decir; ¡anda esos pendientes los hice yo! poniendo cara de sorpresa cuando veía a alguien con algo que yo le había  hecho, realmente les gustaba lo que hacía y eso me motivaba a seguir haciendo cosas nuevas con ilusión y cariño, siempre intentando sorprender. Todo ello me motivo a empezar a vender las cosas que hacía, con la ilusión de ver a la gente por la calle con ellas puestas.